Waldo Portilla Hidalgo asume como nuevo rector del Liceo Católico Atacama: «Estamos llamados a lo imposible»
El Liceo Católico Atacama, una de las instituciones educativas más emblemáticas del país con más de 292 años de historia, inicia una nueva etapa con la llegada de su nuevo rector, Waldo Portilla Hidalgo. Con una trayectoria de 42 años en la educación y un extenso currículum académico, el profesor asume el desafío con la convicción de que su misión es transformar vidas a través de la educación.
Por Felipe Mery Tapia
En una entrevista exclusiva con Diario Chañarcillo, Waldo Portilla, analizó el desafío que significa liderar una de las instituciones más longevas e históricas de Copiapó y Chile. «Es un lindo desafío, más que una gran responsabilidad o algo difícil. Es una gran oportunidad», afirmó Waldo Portilla. Profesor de Educación General Básica, especialista en evaluación educacional y convivencia escolar, y candidato a doctor en educación, el nuevo rector destaca su compromiso con la formación integral de los estudiantes.
COMPROMISO CON LA COMUNIDAD Y LA EXCELENCIA ACADÉMICA
Waldo Portilla enfatiza la importancia de consolidar una comunidad fraterna basada en los valores del Evangelio, alineada con el lema institucional «Paz y Bien». Para él, la educación no solo debe enfocarse en indicadores cuantitativos como los puntajes SIMCE o PAES, sino también en la calidad humana de los egresados. «Nuestro sueño es formar personas que contribuyan a una sociedad mejor, con responsabilidad, esfuerzo, perseverancia y servicio», señaló.
Uno de los primeros desafíos que identifica es potenciar el desarrollo deportivo del Liceo Católico Atacama. «Contamos con una infraestructura deportiva de primer nivel y un equipo de docentes altamente capacitados. Queremos formar estudiantes integrales, donde el desarrollo físico y psicológico sea tan importante como el académico», agregó.
Waldo Portilla también reconoce la importancia de la historia de la institución, fundada en 1732 por los padres franciscanos, quienes se convirtieron en los primeros educadores de la zona. «El Liceo Católico Atacama ha sido cuna de muchos profesionales que hoy contribuyen al desarrollo del país. Es un honor asumir la rectoría de una institución con tanta trayectoria», enfatizó.
INNOVACIONES PEDAGÓGICAS Y ATENCIÓN PERSONALIZADA
Waldo Portilla también apuesta por la co-docencia como estrategia para mejorar el aprendizaje. «Cada estudiante tiene su propio ritmo. Implementaremos un sistema que permita atender tanto a quienes necesitan apoyo como a los que tienen un nivel avanzado y desean nuevos desafíos», explica. Según el rector, la clave está en optimizar los recursos humanos y focalizar la enseñanza en la diversidad de capacidades.
En este sentido, una de sus prioridades será ofrecer una educación equitativa para todos los estudiantes. «El Liceo Católico Atacama no tiene selección de alumnos, por lo que recibe estudiantes de diversas realidades socioeconómicas. Queremos que todos tengan las mismas oportunidades de aprendizaje, ajustando las metodologías para que cada uno pueda alcanzar su máximo potencial«, puntualizó.
Otro punto clave será la revisión y optimización de la carga horaria docente, asegurando que los profesores puedan enfocarse en la enseñanza efectiva dentro del aula. «No podemos seguir asignando a los docentes tareas administrativas que les quiten tiempo de planificación y acompañamiento a los estudiantes. Debemos reorganizar los recursos para maximizar su impacto en el aprendizaje», afirmó.
UN RETO PERSONAL Y ESPIRITUAL
Su llegada al Liceo Católico Atacama no es casualidad, según él mismo lo expresa. Con experiencia en colegios laicos y confesionales, Portilla considera su nuevo cargo como una «misión de vida». «No creo en el azar. Para mí, esto es una intervención divina. Me siento privilegiado de liderar una institución con tanta historia y tan querida por la comunidad», confesó.
Finalmente, Waldo Portilla hizo un llamado a la comunidad escolar: «Estamos llamados a lo imposible. Si no tenemos sueños, estamos condenados a ser viejos jóvenes. Juntos, estudiantes, apoderados y docentes, podemos hacer grandes cambios y seguir transformando vidas a través de la educación».
Con estas palabras, el nuevo rector marca el inicio de una etapa en la que el compromiso, la excelencia y la fe serán los pilares del Liceo Católico Atacama, donde se espera que la institución siga siendo un referente dentro de Copiapó, la región y el país.