Inquietud en la UDA ante despidos de funcionarios por autorregulación financiera

(Por Frenny Kelly Granado). Este lunes circuló por las redes sociales el rumor de que unas 100 personas, entre académicos, profesionales y técnicos, además de otros funcionarios, habrían sido despedidos de la Universidad de Atacama por un supuesto recorte de 35 % de ahorro mensual, motivo por el cual las tres asociaciones que se agrupan en la casa de estudios convocaron a una asamblea general a la que también acudieron los integrantes de la Federación de Estudiantes de la UDA. Sin embargo, el trascendido rápidamente fue aclarado por las autoridades de rectoría señalando que no era un número superior a las 40 personas.

La información que manejaba la presidenta de la FEUDA, Camila Gros, en horas de la tarde, era que habían sido desincorporados 40 funcionarios que ocupaban cargos de reemplazo; sin embargo, dijo que sería después de la reunión con los gremios que se conocieran los detalles exactos de la situación y las acciones que se tomarán en caso de que sea necesario.

La información que transitó entre estudiantes, docentes y demás habitantes de la ciudad, fue confirmada más tarde por el vicerrector de asuntos económicos, Alejandro Díaz Ramos, pero con algunas aclaratorias; por ejemplo, de acuerdo con él, no fueron 100, sino un número que “no superaría el 10 % de la dotación con que cuenta la universidad en la actualidad”.

Según lo que comunicó, se trata de un proceso en el que no serán prorrogados algunos funcionarios con nombramientos en calidad a contrata, debido a que trabajan en la autorregulación financiera y, además, procesan los argumentos de las unidades académicas y administrativas que conforman la UDA, a través de sus Decanaturas o Direcciones correspondientes.

Éstas, de acuerdo con lo que aseguró, están relacionadas con “docentes que tienen baja carga horaria para funciones académicas, investigadores con escasa productividad científica, personal de apoyo administrativo que en algún momento fue contratado para reemplazos temporales, duplicidad de funciones, etc.”.

En ese sentido, aclaró que las personas que fueron despedidas pertenecen a un grupo de funcionarios de distintos estamentos de la UDA; es decir; académicos, profesionales, técnicos, administrativos y auxiliares.

Sobre las causas que motivaron estas desvinculaciones destacan dos aspectos fundamentales; uno de ellos es el asunto financiero y el otro, guarda relación con las notificaciones hechas por las unidades académicas y administrativas.

“La reducción de personal obedece a un proceso de autorregulación financiera, ya que la Universidad de Atacama se caracteriza por ser autónoma y dentro de esto tiene el deber de autofinanciarse”, comentó el vicerrector.

Tomando en cuenta lo que envió a través de un comunicado, eso significa que la institución debe solventar por sí misma sus costos y gastos a partir de los ingresos propios que genera; o sea, que su estructura de coste tiene que estar ajustada a lo que está en condiciones de financiar.

“A la fecha los costos operacionales y los gastos de administración de la Corporación están sobre los ingresos que anualmente la universidad genera, situación que finalmente lleva a que tenga pérdidas operacionales, siendo una situación que se debe corregir”, argumentó Díaz Ramos.

REMUNERACIONES

Respecto al supuesto reclamo que han hecho los gremios por las altas remuneraciones que aparentemente percibe el cuerpo directivo de la UDA y la posibilidad de que este sea parte del incremento de los costos operacionales, el vicerrector puntualizó que “a nivel de la Vicerrectoría que dirijo podemos señalar que en ninguna instancia formal hemos recibido alguna reclamación relacionada con las remuneraciones del cuerpo directivo”.

Según él, los estudiantes no han asistido a las instancias regulares; es decir, la Junta Directiva y el Consejo Académico de la UDA, para plantear sus solicitudes, puntos de vistas y opiniones, por lo que “la información que manejamos respecto a nuestras remuneraciones se limita a reclamaciones anónimas, manifestadas en el plano informal, específicamente a través de algunas redes sociales”.