Orquesta festival Big Band de Copiapó se presenta con éxito en comuna de Taltal y en Casino Antay de Copiapó
*La Orquesta Festival Big Band de Copiapó se presentó el pasado 7 y 8 de febrero en el Casino Antay de Copiapó y en el centro cultural de Taltal, respectivamente. Ante esta gran muestra cultural, como Diario Chañarcillo pudimos conversar con Claudio Moren Carreño, director y productor de la Orquesta Festival Big Band de Copiapó, quién nos contó sobre la conformación de esta orquesta y de la dificultad financiera a la que se enfrentan debido a la “falta de valoración” de la música de este tipo.
POR CATALINA ELÍAS URRUTIA.-
El pasado miércoles 7 de febrero, la Orquesta Festival Big Band de Copiapó se presentó en el Casino Antay donde deleitó con una excelente noche de gala a los asistentes, para luego, presentarse al día siguiente, el jueves 8, en el centro cultural de la comuna de Taltal, en el evento llamado “Encuentro de amigos de Taltal”, una tradición a la que asiste la comunidad local y otras personas que, en algún momento, vivieron allí y aprovechan esta instancia para reunirse.
Con un total de 16 músicos, más un ingeniero en sonido y su vocalista principal, Carlos Sepúveda, la orquesta dirigida por Sergio Contreras se integra de batería, bajo, piano, percusión latina, guitarra, una sección de cinco saxofones, dos trombones y tres trompetas.
Ante esta gran muestra cultural, desde Diario Chañarcillo pudimos conversar con Claudio Moreno Carreño, de profesión profesor de música en educación básica, y director y productor de la Orquesta Festival Big Band de Copiapó, quién nos contó sobre “la necesidad que surge de convertirnos en Big Band, porque, en rigor, somos la una orquesta festival registrada como ´Atacama Orquesta Festiva´”.
Pues, ante la emergencia sanitaria del COVID-19 que en 2020 paralizó todas las actividades presenciales en el mundo, Moreno da cuenta de que, en el ámbito musical se quedaron sin festivales, por lo que se debieron reinventar a través de la realización de espectáculos online. Una modalidad a través de la cual, si bien tuvieron éxito, también les generaba la necesidad de un “mayor dinamismo”
De esta forma, Claudio relata que surgió la idea de invitar a muchos jóvenes que se encontraban estudiando para ser instrumentistas, “para poder hacer un proyecto solo con músicos atacameños”, logrando así, reunir a 18 músicos en verano de 2022 para debutar con un concierto en Caldera y otro en el centro cultural de Copiapó.
“En el segundo año que nos reunimos hicimos algunos cambios, como traer a tres músicos de otras regiones (dos trombonistas de La Serena y un saxofonista de Concepción), pero sigue siendo una orquesta conformada en un 90% por gente de la región”, aclaró.
Así, dieron paso a grabar su primer disco en verano de 2023, llamado “The Beatles en Big Band”, el cual el director destaca como un éxito que llegó a causar impactos al otro lado de la cordillera, logrando incluso que los llamaran desde el gobierno de cultura de Mendoza para invitarlos a ser parte de un magno evento que se desarrollaría en el actual mes de febrero de 2024.
Y, es allí, donde Moreno se detiene con pesar, para relatar que, “lamentablemente, como nos financiamos a través de fondos, sucedió que no se abrió la línea de becas 2023, por lo que no pudimos financiar la ida a Mendoza”, dando cuenta de que aquello fue un golpe muy duro tanto para ellos como grupo.
LA DIFICULTAD DE RECIBIR FINANCIAMIENTO
“Nos formamos con la esperanza de despertar un montón de espacios para hacer música de esta linea, que esta muy asociado al jazz, pero nos encontramos con la sorpresa muy decepcionante de que no fue así, por lo tanto tuvimos que postular a proyectos para poder financiarnos”, confiesa el productor de la Big Band.
Pero esta falta de iniciativa de patrocinio no se debe a que no exista calidad o porque sea poco atractivo lo que ofrece la orquesta, sino que, Moreno da cuenta de que “un grupo de esta magnitud no es atractivo desde lo económico, porque somos muchos. Siempre tenemos que bajar el telón hasta que se abren los concursos de cultura para poder postular a proyectos que, para ser muy honestos, es la única instancia que se atreve a financiarnos”.
Así, el productor explica que, para ellos, una dinámica de financiamiento ideal sería una institución “que nos pueda refugiar económicamente y, a partir de sus aportes, se pueda ofrecer conciertos más sistematizados a la comunidad. Por ejemplo, que una minera pueda financiar y que, a través de la ley de donaciones, pueda asegurar seis conciertos al año, lo que nos permitiría incluso hacer conciertos temáticos para la comunidad”.
“Creo que estos (los conciertos realizados este 7 y 8) son los únicos que tendremos este verano, aunque no pierdo la esperanza de que surjan nuevos eventos a lo largo del año”, agregó, dejando en claro que, a su parecer, “falta más valoración”.
“Ojalá pudiéramos ofrecer cuanto concierto para visitar comunas vulnerables, e incluso asociarlo al realizamiento de talleres por medio de nuestros instrumentistas a los chicos de las comunidades. Son casi inagotables las alternativas que tenemos para ofrecer a la comunidad, pero para eso, se necesita del alero de una institución”, concluyó el director.