Economía y Minería

Chile cumple un año como miembro del TPP-11: un tratado que no estuvo exento de polémicas

Este 21 de febrero de 2024 se cumplió un año desde que entró en vigor la llegada de Chile -como miembro pleno- al Tratado Integral y Progresista de Asociación Transpacífico, más conocido como TPP-11.

Nuestro país se convirtió en la décima economía miembro, sumándose a los otros signatarios (Australia, Brunei Darussalam, Canadá, Japón, Malasia, México, Nueva Zelanda, Perú, Singapur y Vietnam).

En términos generales, la ventaja del Tratado radicó en que más de tres mil productos -de manera gradual y progresiva- irán reduciendo en gran parte o en su totalidad el costo de los aranceles.

También provee una mayor competitividad comercial, generando oportunidades para los trabajadores y los negocios; y un crecimiento sostenible.

Pero la llegada de Chile al TPP-11 no estuvo exenta de polémicas: sin ir más lejos, tanto el Presidente Gabriel Boric como algunos de sus más cercanos se manifestaron férreos contrarios a este postulado.

Uno de ellos fue el otrora subsecretario de Relaciones Económicas Internacionales, José Miguel Ahumada; también el asesor internacional del Mandatario, Carlos Figueroa Salazar, quien incluso fue vocero de la plataforma “Chile mejor sin TLC”.

Y durante su campaña presidencial, el mismo Boric admitió los “ruidos” que le generaba el instrumento. Cuando fue parlamentario, además, votó en contra de la iniciativa.

Por su parte Antonia Urrejola, primera canciller del actual Ejecutivo, cuando el TPP-11 comenzó a avanzar en el Congreso siempre fue enfática en decir que si bien los tratados comerciales son un aporte, para éste en particular se debían revisar aquellos temas que generaban controversias y buscar adecuaciones (normas específicas contenidas en las side letters).

Los detractores del TPP-11 argumentan que atenta contra la soberanía económica de los países y otorga a las trasnacionales derechos a demandar a los Estados en instancias arbitrales internacionales.

En la otra vereda, quienes están a favor -en un análisis macroeconómico- detallan una serie de productos que paulatinamente tendrán mejor desempeño en el comercio exterior (por ejemplo, quesos, leche en polvo, trozos de carnes de aves y congelados con Canadá).

Con Japón, otro de los países que integra el acuerdo, facilita la exportación de carnes, miel, naranjas, pulpas, entre otros productos.

El camino para que Chile integrara el TPP-11 fue largo y polémico. Durante la discusión parlamentaria diversas personalidades señalaron que iba a afectar a la soberanía chilena, a los derechos labores, o al acceso de medicamentos.

Según el diputado independiente de la bancada socialista, Tomás De Rementería, todas esas acusaciones no se transformaron en una realidad.