Camilo Rencoret, mediocampista llegado este año a CDCopiapó: “La idea es que los contrarios sientan que vienen a jugar contra una ciudad completa”

Solo quedan tres partidos para el final de la temporada regular en el Torneo Nacional de Primera B. Hasta el momento, dos equipos luchan por ser campeones y por el ascenso directo, mientras que entre el tercero y séptimo lugar solo hay cinco puntos de diferencia. En ese grupo está CDCopiapó, que este jueves buscará bajar al puntero Magallanes en el Luis Valenzuela Hermosilla. Las entradas ya están a la venta y se pueden adquirir a través del sistema ServiTicket.

Varios jugadores regresarán después de suspensiones y lesiones, por lo que se espera ver un equipo diferente al de las últimas dos fechas. El cuerpo técnico ha optado por dar rodaje a algunos jugadores que se incorporaron este año, sobre todo en la zona media, esperando que puedan generar la dinámica que tiene a los Leones luchando por el ascenso.

Una de las zonas mejor reforzadas esta temporada fue el mediocampo, lugar al que llegó Camilo Rencoret, mediocampista defensivo que hizo la mayor parte de su carrera en Barnechea, club con el que jugó en las tres divisiones del profesionalismo y en el que forjó la mayor parte de su experiencia.

En entrevista exclusiva con Diario Chañarcillo, conversamos con Camilo Rencoret sobre sus primeros pasos en San Vicente de Tagua Tagua y el partido en que Nelson Acosta lo vio y se lo quiso llevar a Everton de Viña del Mar. Además, hablamos sobre su momento en CDCopiapó, la adaptación de su familia a la ciudad y la relación con la hinchada de los Leones.

ENTREVISTA

P: ¿Cuándo comenzó tu carrera en el fútbol? ¿Quiénes te inspiraron?

R: Empecé jugando fútbol en escuelas a los 12 años, en ese momento comencé a entrenar más seguido y a conocer el mundo de este deporte. Anterior a eso, jugaba en una cancha de baby fútbol con mis amigos, era más informal.

Cuando comenzaron las clases, conocí a un profe que me ayudó harto y fue quien más me incentivó, ya que tenía vio potencial en mí. Además, yo asistía a todos los entrenamientos de mi serie y a veces, al de otras series. Ese profe fue quien más me impulsó y me ayudó a convertirme en jugador profesional.

Recuerdo que hacía los trayectos a mis lugares de entrenamiento en bicicleta, allá las distancias permiten hacerlo. Con la bicicleta llegaba a todos lados. La familia de mi papá me apoyó en ese sentido.

Tengo dos hermanos mayores que siempre se preocuparon y me estuvieron aconsejando en esos años. Me preguntaban como me sentía y se preocupaban de que estuviera bien, siempre tuve ese apoyo por parte de mi familia.

P: ¿Dónde están las primeras canchas en las que jugaste?

R: En San Vicente de Tagua Tagua. Allá comencé en la escuela y luego, a los 15 o 16 años, empecé a recibir invitaciones de algunos clubes de barrio para jugar. También me fui formando de esa manera, jugando con gente adulta y en equipos de “Primera” que se les llama en ese lugar. Entonces, ahí comenzó el roce y a dejar de ser solo un juego.

P: Tus primeros pasos en el profesionalismo fueron con Everton, ¿qué recuerdos y qué experiencia te dejó ese inicio?

R: El que me llevó a Everton fue Nelson Acosta en 2008, ya que él también es de la zona de San Vicente. Recuerdo que él, en ese entonces, hizo un partido amistoso entre Everton y General Velásquez y en la previa jugaron los juveniles, entre los que estaba yo. Ahí quedé junto a varios amigos que también se formaron en Everton y son profesionales. Nelson Acosta me vio ese día y me llevó a Viña.

El 2010, logré debutar con Everton en el profesionalismo y en Primera División.

P: La mayor parte de tu carrera la realizaste en Barnechea, ¿qué significa ese club para ti?

R: En Barnechea, se produjo la mayor formación que tuve. Fueron casi 10 años de historia ahí y me tocó de todo. Estuve en las tres divisiones profesionales junto a Barnechea.

Comencé en la “B” del equipo, donde no había una Segunda División Profesional y logramos, en apenas dos años, llegar a Primera División, entonces fue muy importante en todo sentido mi paso por Barnechea, dentro de lo que destaco el aprendizaje en el liderazgo de los equipos, ya que pude ser capitán algunos años.

El cariño que hay hacia la institución y la gente que forma parte del club es enorme. Hay un lazo inquebrantable con ellos.

P: Desde tu llegada a CDCopiapó este año, ¿cómo te has sentido mental y físicamente?

R: Me ha tocado estar más afuera, también he tenido un tema con las lesiones. Sin embargo, siempre estoy buscando aportar desde donde me toque estar, de cualquier manera, por ejemplo, apoyando a compañeros o aconsejándolos.

Cada vez que me ha tocado entrar a la cancha, siento que he logrado dar el 100%.

Por otra parte, siento el apoyo de todos mis compañeros y jugadores de la misma posición. Creo que este punto es super valorable y se agradece mucho cuando un compañero que juega en tu misma posición está ahí para darte un abrazo o ánimos antes del partido para que a uno le vaya bien.

P: ¿Estás recuperado completamente de tu lesión?

R: Si, ya me siento recuperado. En el último partido, sentí un pinchazo en el tobillo, pero no es mayor, así que espero estar en dos o tres días entrenando con normalidad.

P: ¿Cómo evalúas la posición que tiene CDCopiapó en la tabla y lo que queda de torneo?

R: Lo que queda depende completamente de nosotros. Creo que vamos a tomar los últimos partidos de la mejor manera y será un impulso para lo que resta de torneo.

El rival que viene es muy bueno y sabemos que es puntero, pero estamos en casa. No hay nada mejor que recibir en casa al puntero y poder ganarle, así que vamos a ir con todo para despegarnos de los equipos que vienen atrás y asegurar la liguilla.

P: Santiago Morning convirtió dos goles antes de los 15 minutos, ¿faltó concentración en ese último partido?

R: Santiago Morning hizo lo suyo, entro a hacer su tarea que era bien clara y en esas pocas ocasiones nosotros estuvimos desorganizados, además ellos aprovecharon de buena forma esas dos oportunidades de gol que tuvieron al inicio. Después de eso, ellos comenzaron a jugar de otra manera. En una cancha complicada y en esta categoría, no es fácil dar vuelta un resultado así.

Eso sí, me quedo con lo positivo. El equipo luchó hasta el final y tuvimos ocasiones para empatar el partido, eso es lo que uno busca generar. Estoy tranquilo y con los dientes apretados para el siguiente duelo.

P: ¿Cómo sientes el apoyo del público copiapino? ¿Influyen en tu desempeño personal?

R: Uno lo siente y también lo tiene que sentir el rival, la idea es que los contrarios sientan que vienen a jugar de visita y que vean que no vienen a jugar solamente contra 11 jugadores, sino que contra una ciudad completa.

Es importante el apoyo de la gente ahora y será mucho más importante en el caso que avancemos a la liguilla. Hacer valer la localía es muy importante en esas llaves.

P: ¿Tienes algún mensaje para la hinchada?

R: Que vayan a alentar con todo. El equipo está convencido y con muchas ganas de poder ascender, no los vamos a decepcionar.

P: ¿Lograste adaptarte a la ciudad y su gente?

R: Si. Vengo de un equipo que tiene menos gente siguiendo, así que no estaba muy acostumbrado, pero ¿a quién no le gusta que la comuna completa venga a apoyarlo?

Mientras vea a mi familia en el estadio y a toda esa gente con la camiseta de CDCopiapó, sumado a conseguir un buen resultado y que se vayan contentos a las casas, será muy gratificante para mí como jugador.

P: ¿Está tu familia aquí en Copiapó?

R: Si, están conmigo. Tengo dos hijas que están en el jardín y era una de las cosas más importantes que ellas pudiesen estar cómodas y la verdad es que se acomodaron super bien. Por ese lado, ha sido lo mejor para nosotros.

P: ¿Tienes algún pasatiempo fuera de la cancha y los entrenamientos?

R: Más que pasatiempos, me gusta juntarme con mis amigos y las juntas familiares en las que se pueda llevar a las niñas. Nos gusta ir a campings con piscina y todo ese tipo de cosas.

La familia completa está feliz y ya nos logramos adaptar a la ciudad.