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Continúa crisis en Terrapuerto Atacama: Pymes acusan que registran pérdidas económicas elevadas

*A pesar de que destacaron la seguridad y algunos servicios del terminal, las y los comerciantes denunciaron que debido a los coletazos que ha dejado el “caso Terrapuerto”, como la poca frecuencia de público, no han podido generar ganancias. Algunos apuntaron a la falta de apoyo y voluntad del alcalde de Copiapó.

Por Rodrigo Valdés Roa

A dos años de su inauguración, el Terrapuerto Atacama aún no funciona. Como lo dijo el gobernador regional, Miguel Vargas, en muchas ocasiones, ha fallado el Estado y esa falta de coordinación entre las autoridades está afectando no solo al concesionario, sino a muchos pequeños emprendedores de la región.

A juicio de muchos, el Estado no cumple con sus contratos. “Acá el problema es absolutamente político, la seremi de Transportes y el alcalde no han cumplido con lo que comprometieron”, subrayó Héctor, copiapino y usuario del Terrapuerto.

Las consecuencias que ha traído el caso del Terrapuerto, el más moderno del norte de Chile, no dejan de aparecer. Esta vez, los perjudicados son las y los comerciantes ubicados dentro del terminal. Recordemos que, actualmente, el caso escaló a tal punto que llegó hasta la Corte Suprema, organismo que recién dará cuenta en sala y dará lugar a los alegatos correspondientes de las partes, respecto a la apelación, presentada por el Gobierno Regional, en contra del fallo del recurso de protección emitido por la Corte de Apelaciones de Copiapó que acogió la tutela solicitada de Sociedad de Inversiones en Infraestructura S.A.

Dicho terminal, de momento, cuenta con 13 empresas de buses, de las cuales solo cuatro están llegando con frecuencia al recinto. Se trata de Andimar, Plus Chile, Turisnorte y Transmar. Vale decir que, a dichas líneas, se suma Pullman Bus y otras con menos frecuencia como Sokol, Hualpén, entre otras.

 

En paralelo, los problemas que asoman son el poco movimiento de pasajeros y la baja frecuencia de buses. No obstante, a lo anterior, se suma otro problema que aún no tiene solución y que fue acusado por las y los comerciantes que se ubican dentro del terminal: La no generación de ganancias y las pérdidas económicas elevadas. En concreto, serían 35 locales comerciales que están a disposición para ser arrendados, de los cuales solo ocho están siendo utilizados.

Por otra parte, dentro de las ayudas que ha entregado Terrapuerto, una de estas es la reducción del pago del arriendo a un 50%, algo que ha sido confirmado y valorado por las y los comerciantes.

Diario Chañarcillo logró conversar con el administrador de Terrapuerto, Humberto Ubilla, y algunos comerciantes que acusan una pérdida económica en sus bolsillos por la baja frecuencia de personas.

Por su parte, el administrador del Terrapuerto Atacama, Humberto Ubilla, destacó la seguridad, locales de abastecimiento y diversos servicios, como el higiénico y el estacionamiento del terminal. A esto, sumó la particular instalación para el aseo y almuerzo de choferes.

Asimismo, hizo un llamado a las empresas de buses para que “apuesten por el Terrapuerto. Este es un proyecto que va en beneficio de toda la comunidad y también para la empresa. Es un servicio donde ofrecemos lo que hoy día no tiene el centro: seguridad. El terminal está en un punto bien ubicado, la gente encuentra que es lejos, pero 7 a 10 minutos del centro es una distancia también favorable para la gente”.

“Necesitamos que las personas vengan para acá, para apoyar los emprendimientos que son de la región, son copiapinos que pueden estar peligrando sus fuentes de trabajo”, sostuvo Ubilla.

En tanto, una de las comerciantes, Sara Flores (local 11), comentó que “somos pequeñas pymes que estamos recién empezando. Nos ha afectado demasiado la poca concurrencia. El flujo de gente es muy bajo. Hemos pedido y esperado ayuda y apoyo que al cual no hemos tenido de la Municipalidad”.

“Es un lugar tranquilo, la seguridad es impagable, todo es limpio, hay muchas cámaras que siempre están vigilando, guardias de seguridad”, agregó.

A dicha comerciante, se sumó Eduardo Fanreizegen, quien atiende el local 33 de su hija y mencionó que la situación “nos ha afectado harto, porque el flujo de buses todavía no es el deseado. Aparte, yo creo que falta más voluntad del alcalde de Copiapó para que pueda solucionar este problema, porque según el plano regulador no pueden entrar los vehículos al centro”.

También, dio a conocer que la inversión económica la realizó su hija pensando que “iban a llegar todos los buses”. En suma, apuntó que la seguridad y limpieza son ámbitos a destacar en el Terrapuerto en contraste con el centro de Copiapó. “Aquí la gente puede estar tranquila, nadie le va a robar ni molestar. En cambio, el centro es un problema grande: prostitución, drogadicción y asaltos”, aseguró.

Palabras compartidas tiene Marjorie Ábalos (local 22), también comerciante, quien expresó su malestar por la situación e indicó que algunos de los locales en el Terrapuerto “no han podido sobrevivir”.

“La afluencia de público, para mí, es poca. Más o menos el 10% de lo que a uno se le prometió en el comienzo cuando vino a arrendar. Hasta el momento estamos sobreviviendo. No hay ganancias en estos momentos. Vamos a puros números rojos”, dijo.

A las anteriores personas se sumó, Mariela Mamani (local 32), quien dio a conocer que, en su caso, es primera vez que levantan un negocio. “Antes de la pandemia ya estaba toda la plata invertida”, mencionó. “Esperamos que las autoridades puedan ayudarnos más que nada, porque nosotros somos pyme, al igual que cualquier pyme que está en Copiapó”.

Lo cierto, es que el “caso Terrapuerto” seguirá dando que hablar tanto en el ámbito judicial como social, siendo este último en donde las y los comerciantes son quienes sufren los principales coletazos del hecho. Además de las pérdidas y de la inmensa inversión efectuada por la concesionaria.