Sindicato de Axinntus que presta servicios a la Termoeléctrica Guacolda en Huasco, cumple 20 días en huelga
En un contexto sanitario extremo y tras meses de crisis social y una pandemia jamás vivida, 180 familias de Huasco se encuentran sin recibir salario debido a la intransigencia del empleador.
Desde el 12 de enero se encuentran en huelga 180 trabajadores de la empresa Axinntus de Huasco, Región de Atacama, tras la nula respuesta del empleador. Los y las trabajadoras prestan diversos servicios en dependencias de la Termoeléctrica Guacolda, entre los que se cuentan acopio y llenado de carbón, uso y mantenimiento de maquinaria pesada, mantenimiento eléctrico y mecánico de equipos, limpieza química y aseo industrial, entre otras.
Las negociaciones comenzaron en el mes de noviembre y, hasta hoy, la empresa ha sido incapaz de presentar una propuesta coherente y que pueda dar respuesta al petitorio levantado por los trabajadores y las trabajadoras.
Si bien, los dirigentes se han sentado junto a la empresa y han recibido distintas ofertas, cada una de ellas es considerada como una burla a la organización sindical y a las bases que se encuentran aún dispuestas a negociar.
Pese al apoyo recibido por distintos personeros políticos de la zona, la última propuesta ha dejado nuevamente en el suelo las posibilidades de terminar con el conflicto. De forma irrisoria, dicha oferta considera un adelanto de dinero que será extraído del monto destinado a colaciones, es decir, la empresa negocia un término de conflicto sin meter las manos al bolsillo y denigrando económica y moralmente a sus trabajadores/as. Hasta ahora la respuesta de la empresa ha sido, desinterés, despreocupación y represión.
Los sindicatos 1 y 2 de la empresa Axinntus en Huasco permanecen en huelga, manifestándose en la carretera que permite el ingreso a la termoeléctrica, tomando todas las consideraciones sanitarias para evitar el contagio por COVID en los espacios laborales.
De esta forma, la pandemia, el costo de la vida y la situación medioambiental de la zona son aspectos que también relevan los trabajadores y que permiten demostrar que en Huasco se vive una situación crítica; situación que en ningún caso es considerada por la empresa y que tampoco se pone de manifiesto al momento de pensar en una respuesta a sus trabajadores.
¿Cuántos hombres y mujeres más deben engrosar la lista de desempleados? ¿Cuántas familias deben recurrir a sus escasos fondos previsionales para llegar a fin de mes? Situaciones como las que vemos en el norte del país parecieran formar parte de una historia cómica y de mal gusto, sin embargo, se trata de la realidad de miles de trabajadores/as chilenos/as a los que el estado ha abandonado relevando el interés de los poderosos.