La Roja Femenina se mantiene alerta por los cambios en la ANFP
El terremoto político de Quilín tiene con preocupación máxima a las futbolistas chilenas. ¿La razón? Los últimos tres años han sido los mejores de la historia de esta disciplina y se han consolidado gracias al apoyo directivo, con Sebastián Moreno a la cabeza, con un Mundial y dos títulos internacionales a su haber (Brasil y Turquía).
Las jugadoras están alerta. La renuncia de Moreno es motivo de conversación, sobre todo entre las seleccionadas nacionales. Daniela Pardo, referente de La Roja desde 2006 y parte de la comisión negociadora del equipo, explica cómo ha sido el desarrollo de la actividad desde 2016. “Para la mayoría de la gente, esto empezó a partir de la Copa América. Sin embargo, lo más importante fue lo que pasó previo al torneo, cuando (Sebastián) Moreno como secretario general se reunió con nosotras en Francia (Chile jugó un amistoso ante las “Bleues” en Caen en septiembre de 2017) para asegurarnos los recursos y una preparación adecuada para la Copa. Eso fue fundamental”, dice.
Pardo comenta que, a partir de ese momento, las relaciones entre plantel y dirigencia siempre fueron fluidas. “De ahí en adelante hubo mucho diálogo y mucha confianza. Luego de la Copa, seguimos por el mismo camino. Siempre hubo una cooperación mutua, con mucha transparencia, y con una preparación gigante, nunca antes vista en la historia del fútbol femenino”, explica.
Respecto de la competencia interna, el torneo nacional cuenta por vez primera con dos divisiones, ascensos y descensos, lo que favorece la competencia y permite un crecimiento sostenido para cada institución. Para ello, los clubes participantes han ido sumando interés en sus ramas femeninas y, como en los casos de Santiago Morning y Colo Colo, incluso hacerles contratos profesionales a sus jugadoras.
Según Pardo, el desarrollo del fútbol femenino en nuestro país necesita seguir ese camino: “Nos quedó pendiente potenciar más aún el campeonato nacional. Este año se veía un torneo totalmente distinto, mucho más profesional. No es fácil para la directiva que viene enfrentarse a esto; nosotras tenemos claros cuáles son los estándares que necesitamos para competir. Aún estamos en un preolímpico y no es fácil llegar y borrar todo eso de un día para otro. Estamos en alerta, viendo qué va a pasar con el fútbol femenino, pero sabemos que no podemos retroceder. Todo lo que venga debe ser mantener o mejorar lo que teníamos hasta ahora y esa fue la vara alta que nos deja la administración: un periodo súper exitoso para el fútbol femenino”, sentencia. (https://chile.as.com/chile).
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