Adelantan investigación sobre accidente fatal en la salida norte de la capital
El capitán Jorsen Rojas asegura que la luminosidad del By Pass Toledo no es adecuada para la movilización vehicular, por lo que se cree que el conductor ingresó mal y al darse cuenta, quiso retornar realizando una maniobra prohibida que le costó la vida.
Fotos: Cortesía
(Por Frenny Kelly Granado). La Sección Investigadora de Accidentes de Tránsito (Siat) de Carabineros de Chile, todavía reúne antecedentes para ayudar al fiscal Luis Morales, de Copiapó, a esclarecer cuál fue la causa que originó la colisión entre vehículos que cobró la vida de un hombre de 58 años durante la noche de este domingo.
Además del análisis técnico realizado en el sitio del suceso, el cual fue en el By Pass Toledo, específicamente en sentido Norte – Sur entre Caldera y la capital regional, trabajan en la confirmación de las declaraciones de testigos, que según el capitán Jorsen Rojas Mella, comisario subrogante de la Segunda Comisaría, apuntan a que se trataría de una eventual mala maniobra.
De acuerdo con los datos obtenidos sobre el hecho registrado poco después de las 20:00 horas, Herman Jobel Altamirano Acosta conducía una Station Wagon Hyundai Creta de color gris, en compañía de cuatro personas; una de ellas adolescente de 15 años, cuando fue impactado por el costado izquierdo por un bus que hacía transporte a una empresa minera.
Lo que se cree, y es la teoría que estudian los investigadores, es que Altamirano Acosta “aparentemente habría realizado una mala maniobra, queriendo retornar por la misma vía -que no está habilitada para (tal) efecto- lo que provoca que el bus que lo antecedía colisionara de manera frontal al costado”, causándole la muerte de manera casi inmediata y dejando a los otros cuatro ocupantes lesionados.
Tres de los heridos son adultos y, tomando en cuenta la información ofrecida por Rojas Mella, su condición es grave; no así para la adolescente que sufrió magulladuras de menor complejidad, quien -igual que los otros tres- fue llevada al Hospital Regional San José del Carmen de Copiapó, hasta donde llegó el personal de la Siat para adelantar el informe preliminar.
La información que se recabó respecto al siniestro es que las víctimas -algunas de ellas turistas que venían desde la ciudad de Los Vilos, en Coquimbo- pasaron la tarde en la playa de Barranquilla, en Caldera y a esa hora pretendían volver a Copiapó, ya que algunos de los pasajeros eran de esta comuna.
Aunque Rojas Meja dijo que no se presume la ingesta alcohólica, se supo que ambos conductores fueron sometidos a pruebas de alcohol para determinar si estaban o no bajo la influencia de alguna sustancia etílica. Obviamente, en el caso de la víctima fatal los resultados se obtendrán junto con la autopsia.
De todos modos, esto es materia de investigación y hasta tanto los expertos de la Siat no tengan todos los elementos claves para tejer una hipótesis sobre lo ocurrido, no entregarán el informe respectivo a la Fiscalía para que esta realice la persecución penal correspondiente.
Por cierto, el conductor del bus involucrado en el hecho no está detenido, puesto que a pesar de que en primera instancia fue puesto en custodia por el “cuasidelito de homicidio”, después fue “apercibido bajo el artículo 26, lo que significa y se traduce que quedó en libertad y en espera de citación por parte de Fiscalía”.
