LA COLUMNA MARCIAL Por Luis Astorga Camus ASTORGA DOJO.
PRIMERO ENTIENDA QUE ES UN DOJO !!!
Una de las cosas más inusuales y difíciles a las que tanto los estudiantes como los padres deben adaptarse al comenzar el entrenamiento de artes marciales es la etiqueta en el dojo. Un dojo es un lugar de aprendizaje en el que tanto los estudiantes como los instructores ponen mucho énfasis en lo que se puede denominar valores tradicionales. La mayoría de los dojos auténticos y buenos tendrán su cartel de las Reglas del Dojo en algún lugar que sea visible tanto para los estudiantes como para los visitantes en su dojo. Para ayudar a los nuevos estudiantes / padres del dojo a comprender cómo se manejan las cosas en el dojo, es importante cubrir varios temas sobre esto.
Primero entienda qué es un dojo. Un Dojo no es un gimnasio. No es un lugar donde un estudiante venga a pasar el rato o jugar. Los estudiantes están allí para entrenar, mejorar y desarrollar confianza en sí mismos, autodisciplina y perfeccionar su arte marcial. Tampoco es un campo de fútbol donde los padres puedan gritar, quejarse y decirle al entrenador qué hacer. En un buen dojo no habrá nada de eso y la mayoría de los padres luchan con este ideal, pero esto es Karate, no deportes para niños. Un Dojo es un lugar sagrado lleno de etiqueta, tradición, equidad y superación. Se considera sagrado para cada estudiante y cinturón negro que entrena allí. Los estudiantes y visitantes se adherirán a pautas estrictas, tratarán al Sensei con respeto en todo momento y ayudarán a mantener el dojo limpio y en buen estado. Un Dojo se considera el hogar del Sensei, por lo que es importante que los estudiantes y visitantes actúen en consecuencia.
En cualquier buen dojo de Karate, una de las reglas más importantes es la etiqueta. Somos humanos y aprendemos por ensayo y error. Muchas cosas en el dojo se perdonan cuando se trata de entrenamiento, pero la mala conducta, la falta de respeto y la rebeldía definitivamente no se perdonan ni se toman a la ligera. Esta regla se aplica a todos los estudiantes desde los cinturones blancos hasta los cinturones negros por igual. De hecho, cuanto más alto se vuelve un estudiante, más estrictas son las pautas de etiqueta. Es responsabilidad de cada estudiante asegurarse de que los que los siguen lo hagan de manera adecuada y con gran respeto a las reglas de etiqueta del dojo. Es importante notar que las correcciones al comportamiento de uno vienen de arriba hacia abajo, nunca de abajo. En otras palabras, el sensei está a cargo y nadie más debe asumir que puede disciplinar a un estudiante sin el permiso del sensei.